Tonatihu Rojas López

Un trágico suceso tuvo lugar la noche del miércoles en el vecindario de Longwood, en El Bronx, New York, Estados Unidos, donde Tonatihu Rojas López, un hombre de 34 años de origen centroamericano, acabó con la vida de su madre, Paula López (57), y su padrastro, Francisco Ferrer (57), antes de quitarse la vida frente al edificio en el que ocurrió el crimen.

Según informes de las autoridades, Rojas López, quien aparentemente sufría de depresión, disparó a su madre y padrastro dentro de su apartamento ubicado en el segundo piso del edificio situado en el 613 de la avenida Southern Boulevard.

Tras los asesinatos, el hombre salió del apartamento y, ante la mirada de varios vecinos, se sentó en las escaleras del edificio antes de dispararse en la cabeza con la misma pistola. Los hechos ocurrieron poco después de las 8:00 p.m., según reportes policiales.

La policía del cuartel 41 llegó al lugar tras recibir múltiples llamadas al número de emergencias 911 que alertaban sobre disparos alrededor de las 9:30 de la noche.

Al llegar, encontraron a la pareja fallecida en el interior del apartamento y a Rojas López con heridas de bala en la cabeza y el torso fuera del edificio. Aunque fue trasladado de inmediato al hospital Lincoln, los médicos confirmaron su muerte poco después de llegar.

Vecinos y familiares identificaron a las víctimas, aunque la policía aún no ha hecho oficial la divulgación de sus nombres. Se sabe que la familia llevaba más de 15 años viviendo en el mismo edificio.

Aún no se ha determinado la nacionalidad exacta de las víctimas ni el motivo que llevó a Rojas López a cometer estos crímenes. Tampoco se encontró ninguna nota suicida que pudiera arrojar luz sobre sus intenciones.

Una versión de los hechos indica que el asesino-suicida habría permanecido un tiempo en las escaleras del edificio antes de quitarse la vida, lo que fue presenciado por algunos vecinos.

Otra versión señala que fue necesario llamar a técnicos de Con Edison debido a un fuerte olor a gas en el apartamento, lo que hizo sospechar que Rojas López podría haber abierto las hornillas de la estufa con posibles fines peligrosos. Sin embargo, esta teoría no ha sido confirmada por las autoridades.

Durante la investigación, los residentes de los apartamentos cercanos fueron evacuados por más de una hora, mientras la policía procesaba la escena del crimen. Las investigaciones continúan, aunque hasta el momento no se ha revelado un historial delictivo por parte de Rojas López.