Un niño de 7 años identificado como Gabriel Garate perdió la vida en los brazos de su padre el martes pasado cuando fue atropellado por un automóvil cuando la pareja cruzaba la calle en un cruce peatonal marcado en Long Beach, Los Angeles, California, Estados Unidos.
“Perder a tu hijo de una manera tan horrible, una manera tan horrible de perder un hijo”, dijo Francisco Garate.
En los brazos de su padre el jovencito perdió la vida, era el día martes a las 5:20 p. m. en Lakewood Boulevard y la calle 23rd.
Iban a cruzar para el otro lado de la calle, para jugar béisbol en el parque.
“Hicimos todo bien, íbamos caminando para ir a jugar a la pelota. Cruzando la calle. Íbamos caminando y se lo acaba de llevar el carro”, recordó Gárate.
Los dos estaban cruzando Lakewood Boulevard hacia el este en la calle 23 cuando en ese momento se acercaba una camioneta Dodge no le dio el paso a los peatones, y sucedió la tragedia, revelaron los investigadores del alguacil del condado de Los Ángeles.
El niño estaba justo en frente de su papá, Francisco, ambos en el cruce de peatones marcado con la señal intermitente de derecho de paso para peatones.
El conductor de 57 años, James Barnes, de Desert Hot Springs , dice que no vio al niño y lo impactó.
"Lo agarré, lo sostuve, solo lo sostuve en mis brazos", dijo su padre. "Se lo llevaron tan abruptamente", agregó.
Gabriel era un joven que disfrutaba mucho de las playas y los deportes, pero no solo eso, también le gustaba estar en la escuela. Se le recuerda como un niño brillante y enérgico que trajo a su familia muchas risas y amor.
"Hacíamos todo juntos. Era mi mejor amigo", dijo el padre de Gabriel.
"Era mi bebé. Era tan feliz, inteligente. Tenía tanta personalidad", dijo la madre de Gabriel, Dawn Garate.
El conductor permaneció en el lugar y cooperó con la investigación, dijeron las autoridades. Fue arrestado por H0MICIDI0 vehicular grave con negligencia grave y luego fue liberado.
No se esperaba que las DR0G4S y el alcohol hubieran sido un factor en el incidente.