Una niña de 4 años perdió la vida de forma trágica y lamentable mientras disfrutaba de un día junto a su familia, en un hecho sucedido en el condado de Yuba, California, Estados Unidos.
La niña fue identificada solo como Tatum, perdió la vida el fin de semana pasado cuando desapareció en el lago Collins, cuando se bañaba junto a su familia. 30 minutos pasaron antes de poder localizar el cuerpo.
La niña estaba disfrutando junto a varios miembros de su familia en un área de natación pública del lago, sin embargo, de repente no la vieron más.
La Oficina del Sheriff del condado informó que la menor fue vista por última alrededor de las 5:30 p.m. de ese día, cerca de la orilla del agua.
Los agentes que acudieron al llamado de emergencia señalaron que la niña estuvo en el agua durante 30 minutos antes de ser encontrada sumergida en el fondo del lago.
Cuerpos de emergencia la sacaron del agua y aplicaron primeros auxilios tratando de salvarle la vida antes de llevarla al hospital, donde finalmente fue declarada sin vida.
Los familiares de la pequeña esperan recaudar $25,000 para "despedir a la dulce niña como se merece", y esto lo esperan lograr mediante la plataforma GoFundMe.
"El sábado 20 de agosto nuestras vidas dieron un vuelco. Nuestro precioso bebé Tatum perdió la vida en un trágico accidente", menciona el organizador de la colecta.
De este lamentable caso podemos sacar dos lecciones:
La primera es que todo el que no sepa nadar, principalmente los niños, deben llevar siempre puestos sus chalecos salvavidas, aunque sea un área apta para el público.
Lo segundo es que cuando se trata de niños, debe haber una persona designada para vigilar a cada niño en todo momento. Repetimos: Una sola persona por cada niño.
¿Por qué una sola persona? Porque si son varias personas quienes supuestamente se encargan de vigilar a los niño, cada uno va a pensar que el otro está vigilando y van a llegar varios momentos donde nadie está vigilando a los niños y ahí suceden las desgracias.