En la tarde del miércoles 8 de enero, se registró un lamentable incidente en la Comunidad de las Casinhas, ubicada en el barrio Guajiru, municipio de Caucaia, en la región metropolitana de Fortaleza, Brasil.

La víctima fue identificada como Jamille Fernandes Gomes, de 20 años, originaria del municipio de Canindé.

Según información preliminar, Jamille fue encontrada con las manos atadas a la espalda y con impactos de arma de fuego.

El cuerpo estaba en una zona vinculada al programa Minha Casa Minha Vida, reconocida por ser escenario de disputas entre facciones criminales.

Testigos señalaron que la joven estaba acompañada por personas relacionadas con la facción Comando Vermelho (CV), lo que sugiere que el suceso podría estar vinculado a conflictos entre grupos criminales activos en la región.

Las autoridades policiales acudieron al lugar para realizar los primeros levantamientos y aislaron el área para las investigaciones de la Pericia Forense.

El caso está siendo investigado por la Policía Civil de Caucaia, que busca esclarecer las circunstancias del hecho e identificar a los responsables.

Este trágico episodio pone nuevamente en evidencia la creciente violencia relacionada con el crimen organizado en áreas urbanas de Brasil como Caucaia, donde se ha registrado un aumento preocupante de incidentes ligados a disputas entre facciones.

El jueves pasado la joven fue sepultada en el municipio de Canindé, en el interior de Ceará, pero su entierro estuvo marcado por una situación insólita. Durante el entierro, el cuerpo de la joven quedó expuesto luego de que se rompiera la cuerda del ataúd.

El momento en que ocurrió todo fue grabado por familiares que asistían al funeral de la joven. En el video se puede ver que cuatro hombres están colocando el ataúd dentro de la tumba, cuando una de las cuerdas de soporte se rompe.

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