En la ciudad de Pyt-Yakh, de Rusia, una joven identificada como Diana Agilova, de 30 años, cayó desde la ventana de un apartamento en el octavo piso durante la noche del 24 al 25 de octubre de 2023.

Diana, quien recientemente había perdido a su madre y a su abuela, aterrizó sobre el capó de un coche antes de golpear el suelo.

A pesar de la gravedad del impacto, los médicos, que inicialmente creyeron que estaba muerta, detectaron signos vitales mientras la trasladaban en ambulancia.

Actualmente, Diana se encuentra hospitalizada en estado crítico y no puede ser trasladada a un centro médico mayor debido a la gravedad de sus lesiones.

Amigos cercanos describieron a Diana como una persona con una personalidad "peculiar", interesada en la subcultura gótica, el esoterismo y la astrología.

Su página en la red social VKontakte contenía citas motivacionales y publicaciones relacionadas con temas astrológicos y espirituales.

Tras la muerte de sus familiares, Diana intentó sobrellevar su duelo enfocándose en el cuidado de los animales, especialmente de su perro Lanka, quien había tenido cachorros recientemente.

En agosto, compartió en redes que los animales la ayudaban a encontrar fuerzas en un momento oscuro de su vida.

La caída ocurrió en el edificio nº 18 del microdistrito 3. Diana permaneció expuesta al frío durante un tiempo antes de que llegara la ambulancia, lo que agravó su estado debido a la hipotermia, además de las lesiones múltiples sufridas.

La policía investiga el caso como un posible intento de suicidio, aunque los detalles siguen bajo análisis. Amigos cercanos indicaron que Diana, aunque aparentaba fortaleza y belleza exterior, enfrentaba un profundo sentimiento de soledad y luchaba con dificultades emocionales.

El incidente ha conmocionado a la comunidad. Una amiga de la infancia expresó su asombro, recordando a Diana como alguien admirada por su belleza, pero también con una personalidad "diferente" que reflejaba su interés por temas espirituales y oscuros.

El coche donde cayó sufrió daños significativos, pero su propietario, en lugar de preocuparse por ello, deseó la pronta recuperación de Diana.

Mientras Diana sigue luchando por su vida, este caso ha reabierto el debate sobre la importancia de la salud mental y el apoyo emocional durante períodos de pérdida y crisis personales. Las autoridades y sus amigos cercanos continúan atentos al desarrollo de esta tragedia.

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