La Policía Civil de São Paulo, Brasil, ha identificado a Clisia Lima da Silva, una mujer de 35 años, como la víctima encontrada sin vida en el río Jaguari, ubicado en Piracaia (Sao Paulo), el pasado miércoles.

Clisia, quien recientemente se había mudado desde Manacapuru (Amazonas) a la región de Bragança Paulista con su pareja, fue encontrada con manos y pies atados, lo que ha generado una fuerte investigación por parte de las autoridades.

El novio de Clisia, con quien había iniciado una nueva vida en São Paulo, ha sido señalado como el principal sospechoso y será llamado a declarar ante la policía.

Según el delegado Sandro Montanari, encargado del caso, la autopsia confirmó que la causa de la muerte fue un traumatismo severo en la cabeza y la columna vertebral, lo que indica que la víctima fue golpeada con gran violencia.

Las investigaciones preliminares descartan cualquier señal de lucha, sugiriendo que Clisia podría haber sido sorprendida por su atacante.

A pesar de que el cuerpo fue encontrado en el agua, las autoridades han descartado el ahogamiento como causa del deceso.

La víctima fue hallada en el río, cerca de un puente de aproximadamente 20 metros de altura. Además, las sospechas iniciales sobre un posible embarazo fueron desmentidas tras el examen forense.

Clisia, madre de una niña, compartía en sus redes sociales mensajes afectuosos hacia su hija, además de llevar un tatuaje con su nombre en el cuerpo.

El caso ha sido registrado oficialmente como homicidio en la comisaría de Piracaia, y las autoridades continúan con las investigaciones para esclarecer todos los detalles y dar con el responsable de este trágico suceso.

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