Por Rafael Zapata.
SANTO DOMINGO.- El hombre que fue ultimado y amarrado era el primer teniente de la Policía Nacional José Joaquín Encarnación Montero, de 41 años, un ciudadano haitiano con se propia arma le quito la vida, debido a que le debía dinero, y la víctima fue hallada sin vida en la Avenida Ecológica, dentro de Ciudad Juan Bosch, en Santo Domingo Este, el martes por la mañana.
Según una persona cercana a Encarnación Montero, el presunto delincuente vivía hoy en la casa del fallecido en el barrio Valiente de Boca Chica y había sido citado para pagar la deuda.
Según la fuente, "Tenía una casa alquilada a un haitiano; ese mismo haitiano le debía dinero que José Joaquín le había prestado; lo citó ayer para pagarle en la noche; y al parecer él y otro lo mataron con su propia arma".
La conversación que descubrieron en el teléfono de su familiar, continuó, les permitió conocer de inmediato la versión que ofrecían sobre el incidente.
Afirmó que el extranjero mencionado y una segunda persona, que parecía estar con él, estaban detenidos en relación con el incidente. El primero fue detenido en Valiente, y el segundo fue detenido en el municipio de Haina.
Encarnación Montero, oriunda de Las Matas de Farfán que abandonó a tres niños pequeños, fue encontrada muerta en un espacio verde frente a la comisaría de la ciudad de Juan Bosch con un impacto de bala en la cabeza y atada de pies y manos.
Junto a su cuerpo fueron descubiertas una pistola 9 mm y su billetera con sus documentos personales.
Era policía de Protección Judicial adscrito a un juez de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) al momento de su trágica muerte.
El juez de la Sala Tercera del Alto Tribunal, magistrado Anselmo Bello Ferreras, quedó a cargo de Encarnación Montero.